El mitin digital

Imagínate un mitin político. ¿Existe algo más inútil? Juntamos a un montón de gente que no necesita escuchar lo que les vamos a decir porque aplaudirán cada vez que el orador acabe una frase levantando la voz, todo a cambio de un poquito de ruido en prensa, radio y televisión. Bien para captar votos a gran escala pero, ¿y si queremos ser alcaldes de un pueblo pequeño? Uno de esos en los que se sabe todo. No tendría mucho sentido hacer un mitin. Más práctico sería para el candidato darse un paseo por el pueblo, por la plaza, por el bar... Por los lugares donde los ciudadanos se encuentran y hablan de sus preocupaciones. Escucharía atentamente, pensaría cómo va a responder a esas preocupaciones y se lo haría saber. En esta pequeña escala es la comunicación pluridireccional de un corro o una comunidad y no la unidireccional del mítin la más efectiva para hacer llegar tu mensaje.

Y todo esto porque hace unos días se preguntaba Sergio Ortega en su blog:
"¿Crees que tu sitio realmente necesita comentarios?" La duda es más que razonable, porque nos hemos acostumbrado a algo que sí o sí debe estar y no nos preguntamos: ¿Cuál es el valor de un único comentario? ¿Y de 543 en la misma noticia?

Fue tratando de contestar a esta pregunta como se me ocurrió este símil. Y es que los medios tradicionales fueron muy rápidos en permitir a los usuarios dejar comentarios en sus noticias pero no supieron muy bien qué hacer con ellos. Estos medios siguen dando su mitin. Hablan a la audiencia que siempre les escucha, les dan justo lo que esperan y se bajan del escenario entre la ovación de su público (traducida en esa marea de comentarios, que no conversación, aplaudiendo y jaleando lo que se ha dicho mientras de vez en cuando se suelta alguna puyita gratuita al rival). Y esto les pasa a todos, da igual que seas El País, El Mundo o Marca. Mientras tanto, la gente inquieta de verdad, la que quiere respuestas y no eslogans sigue pasando de largo del mitin y se va a la cafetería o a la plaza a charlar con sus conocidos de lo que de verdad les interesa.

Gary Vaynerchuk hablaba esta semana de las reglas del pueblo pequeño, haciendo referencia a esta misma idea; pero hace diez años, antes que todos estos gurús del social media, El Manifiesto Cluetrain ya decía: "Los mercados son conversaciones." En resumen:

1. En tu sitio debería haber lugar a la conversación.

2. En cuyo caso debería necesitar comentarios.

3. Si no es tu caso allá tú. Entonces sí, te los puedes ahorrar y dejarlo en un "me gusta" o "no me gusta" junto a la noticia.

Enlaces:

• ¿Crees que tu sitio realmente necesita comentarios? En el Blog de Sergio Ortega.
• Small Town Rules, por Gary Vaynerchuk.